ARTISTAS, GRUPOS...:
GÉNEROS, ESTILOS...:
SALAS, FESTIVALES...:
SELLOS, DISTRIBUIDORAS, EDITORAS, PROMOTORAS...:
Libre para elegir qué cantar no siempre fue a su larga colección de canciones de éxitos, suyos, de Tequila o Los Rodríguez.
No se sabe si el rock and roll lo inventó un argentino, al menos pelean el origen de su variedad en español con los cubanos (y algún mejicano que quiere su parte), pero que nacieron ambos el uno para el otro está fuera de discursión. ARIEL ROT es el ejemplo perfecto de que comparten códigos genéticos y emocionales.
Tampoco suele ser habitual por aquí que gente del rock and roll se conviertan en "bandas de una sola persona", pero vamos, ni en tiempos de crisis, que siempre buscan algún socio que acompañe y ejerza de red de emergencia; tirando de memoria, casualmente (o no), los tres que hemos visto Granada: Mauricio Birabent (el inmenso Moris, padre de todo esto), Carlos Michelini y Luis Augusto Maldonado ¡son argentinos!
Con la libertad absoluta que da la soltería sonora, en tiempos, formas, comunicación y argumentos, Rot estuvo radiante en su concierto en la Forum Plaza de Granada el pasado jueves, y, a pesar de que el iluminador lo mantuvo en una sosa penumbra monocolor, él daba luz suficiente para vernos todos. Sin más equipaje que dos guitarras, acústica y eléctrica, y un teclado y, eso sí, todo el gracejo porteño, templado, buenhumorado (y con dobleces) que trae de serie, Ariel se convirtió en una Big Band de un solo músico pero llena de estrellas, la gran "Rot All Stars".
Uno llegó cuando "tributaba" a su maestro Moris con 'Loco mundo': es preciso indicar que esa mezcla de rock tango y cadencias del Río de la Plata las conocimos gracias a él, que en los setenta actuaba solo con su Gibson por los bares. Volvería indirectamente sobre el personaje, ya que al final del concierto 'Bruma por la Castellana' parece la natural continuación del 'Nocturno en Princesa' de aquel.
Libre para elegir qué cantar no siempre fue a su larga colección de canciones de éxitos, suyos, de Tequila o Los Rodríguez: 'Los tipos duros no bailan', 'Cenizas en el aire', 'Dos de corazones', '3 balcones', 'Manos expertas', etc., fueron algunas de las escogidas (además de dormir en la nevera, porque no envejece, ¡tampoco lleva cuaderno con las letras!), expuestas con muy elegantes arreglos, mucho feeling en la guitarra, puro honkytonk en los teclados y querencia por lo escrito, en ocasiones reflejo de vivencias o anécdotas, como apuntó. El swingueante ejercicio de digitación de 'Confesiones de un comedor de pizza', tras dos tandas de bises (y porque no quiso más), fue la firma final de un concierto inmenso: "es solamente rockandroll solo... (But I Like It)".
Anuncio de Google Ads //// ANÚNCIATE AQUÍ
Prometemos no ponernos pesados... ;)
Anuncio de Google Ads //// ANÚNCIATE AQUÍ
Anuncio de Google Ads //// ANÚNCIATE AQUÍ