MIGUEL ANTONIO HURTADO  |  Madrid, 24/01/2011

Era principios de octubre cuando acudimos a cubrir un minibolo de RENÉ en la sala Costello de Madrid. El motivo de aquel evento no era otro que obtener unas imágenes en vivo para insertar en el videoclip 'Por fin' y ofrecer una selección previa de su primer disco, 'Sólo puedo ir a peor'. Nos gustaba lo que oíamos y queríamos más, pero por el devenir del mundo de los locales, a las 23:00 h., sin ninguna posibilidad de dilación, aquello se acabó dejándonos con la miel en los labios.

Así que el pasado miércoles no nos lo podíamos perder, habíamos probado la tapa y ahora queríamos la ración completa. Y como si de dar continuidad se tratase, a las 23:00 h. comenzaba el concierto, con un guitarrista más que en la ocasión precedente (José María Romero, "Pipo") y con Iñigo Iribarne a la batería en lugar de Christian Chiloe. Así, completando la banda con el bajista Fede Rumpler, Isaac Miguel comenzaba la noche de pop pegadizo y fresco, fácil de seguir, de bailar y de corear, con el tema 'La bola de mundo'. Y parecía que René tenía prisa por hacer sonar su tema estandarte, 'Por fin' (que repetiría en los bises), así que casi de corrido y bajo los reflejos de los focos en rojo la puso en escena para que los cuerpos vibraran y bailaran sin parar.

"Este no es un concierto normal, vamos a dar mucho que hablar" afirmaba con total seguridad Isaac antes de dar paso a sus encuentros y desencuentros con el amor, la mujer, la pasión, en temas como 'Pensando en ti', 'Pronto me verás', 'Mi primer amor', 'Prepárate' o 'Yo no era para ti' (ésta última, de ritmos brasileños, fuera del disco). Temas con los que podemos descubrir la versatilidad y la facilidad con que Isaac cambia de registro con una voz clara, potente y siempre bien situada. Cañeras versiones de 'Lady Madonna' de los Beatles y de 'Crazy little thing called love' de Queen para dejar patente cuales son sus influencias. Una especie de tecno-trash con 'Salgamos a Bailar' para dar paso al momento de los bises que abrían con Isaac en solitario dedicando a su madre la balada excelentemente entonada 'No estoy'.

Punto y final con 'Calle Laurel', un sentido homenaje a su ciudad, Logroño, a sus orígenes, a sus amigos. René dio todo en la palestra donde no faltó el sudor a chorros compensado con continuos tragos de agua para contrarrestar la sequedad. La entrega de René fue total; no escatiman nada para que el disco suene, y suene bien. Estamos convencidos, materia prima hay, y más pronto que tarde René estará dando "la nota" en muchas orejas. Disfrutadlo en Logroño en la Sala Concept el 11 de febrero y en Salamanca el 17 de febrero en la Sala Camelot.