DANI ILLANA  |  Cádiz, 06/05/2010

Especie de moderna blueswoman, la gaditana MARINA GALLARDO se descuelga de modas y tendencias con un puñado de canciones geniales que juegan con sonoridades oscuras y en las que pesa tanto cada nota como cada silencio. Su segundo trabajo merece ser más que tenido en cuenta, y su agudeza a la hora de dar respuestas hace imprescindible darle un par de minutos para leer la entrevista que BuscaMusica.es le ha realizado.

- 'Some monsters die and others return' es tu segundo trabajo, nuevo pero pegado a la línea del primero, 'Working to speak'.

- Bueno, yo no veo tanta afinidad con el primero... Desde mi posición lo veo todo muy distinto: ha sido un disco esencialmente producido por mí y muy meditado durante estos dos años en todos sus aspectos. Tampoco he buscado una similitud o distancia con respecto al anterior trabajo de forma intencionada. Me gusta que las cosas evolucionen a su ritmo y, en realidad, cuanto menos piense en estas cosas... mejor.

- ¿Por qué los monstruos centran este trabajo?

- Espero que el disco hable por sí mismo, pero la cita que acompaña al disco trata de complementar el sentido de ese título. Darte una respuesta concreta sería algo demasiado personal.

- La primera canción del disco se llama 'A beast in me''; viéndote a simple vista parece que está muy bien escondida.

- ¡Vaya! ¿Y eso por qué?

- Porque no parece que haya una bestia, pero dejemos eso. Las canciones tienen una simplicidad instrumental que les da un aire si cabe más misterioso.

- En mi caso, no puedo concebir la música sin misterio. Puede que esa simplicidad esté muy ligada al silencio, a cómo discurre en las canciones, y al juego de los tiempos. He tratado de reducirlo todo un poco a lo mínimo, a un sentido originario y primitivo. Para mí era muy importante que todos los arreglos del disco tuvieran ese sentido, que arroparan el origen de las canciones, cabalgaran con él y ayudaran a crear esa atmósfera. Por otro lado, también he tratado de buscar armonías complementarias que busquen los límites de la canción, que prácticamente la deshagan. Puede parecer sencillo, pero en el fondo es complicado, pues al final se trata de buscar exactamente lo que expresa un sentimiento. Hace unos años vi el documental de Scorserse sobre los orígenes del blues, y alguien que no recuerdo comentó algo que define muy bien todo esto de la simplicidad: cada cuerda se tocaba con un sentido, era verdaderamente necesaria. Otha Turner también comentaba algo así: "estas flautas sólo tienen dos sonidos, agudo y grave. Con la flauta puedo hacer todo lo que quiera. Se lo demostraré".

- Pero la gente de Cádiz se supone que es chistosa y dicharachera...

- Es que somos bipolares.

- Tu forma de tocar la guitarra y los ritmos que usas están muy marcados por el blues ¿Es lo que sueles escuchar normalmente?

- Suelo escuchar mucha música de origen, pero sí es cierto que he pasado tres o cuatro años escuchando mucho blues: Skip James, Leadbelly, Son House, Charly Patton, Otha Turner, Bukka White, R.L Burnside... El blues de los orígenes, como parte del folk, tiene algo que se identifica con mi forma de ver la música; se creaba para expresar el dolor que les proporcionaba vivir en un mundo que escapaba a sus manos, suponía una liberación. Además lo hacían con sus pocos recursos, una guitarra acústica, una voz y un zapato. La música debería ser siempre así, honesta, necesaria y desinteresada. Siento que es de las pocas cosas en este mundo que nos da libertad, que escapa de ser un producto de mercado interesado, a pesar de que para algunos se haya convertido en eso.

- Teniéndolo tan cerca, entiendo que era casi inevitable acabar grabando con Paco Loco.

- Paco es muy bueno, y grabaría igualmente con él si viviera en la otra punta del país. Con él me siento cómoda; hablamos sobre las canciones, le explico mis ideas y las sabe captar muy bien. Además de todo eso, es muy buena persona.

- Sin hacer ningún alarde, tengo que decir que hay momentos del disco en que tu voz me ha dejado hipnotizado.

- Gracias, hombre.

- De nada. ¿Estar editada por un sello pequeño es garantía de independencia?

- No tiene por qué. La independencia tiene que ver más bien con la libertad. Foehn Records es un sello muy pequeño e independiente, no está asociada a una editorial multinacional, algo complicado en los tiempos que corren. Tienen unos valores que aprecio mucho, no piensan en la música como un producto, y eso es lo que ofrecen: libertad. Sólo me gustaría que se les tuviera aún más en consideración.

- Russian Red, Anni B. Sweet, Alondra Bentley, Boat Beam... ¿Hay una revolución femenina en el rock español?

- Es posible.

- Pero, ¿por qué casi todas las nuevas mujeres cantantes dicen que no tienen nada en común con el resto?

- Quizás sea porque no tienen nada en común... No hay por qué empeñarse en una rivalidad. Todo parece fruto de una moda inventada por los medios. Siempre digo que todo esto es más bien consecuencia de Myspace que de la revolución de un género. ¿Ahora se hace más música? No, ahora se da a conocer más música porque hay herramientas que lo permiten. Todo son clasificaciones, referencias... En realidad me apena un poco, porque todo es un tanto superficial y se tiende a olvidar que esto es música, y que la música está muy por encima de etiquetas, de valoraciones, de críticas... Me gustaría que se tomara a alguien o a su música por lo que es, y que se hiciera el esfuerzo de no caer bajo lo mismo. Es algo que he percibido en estos dos años... el interés por mostrar antes las referencias (las que cree cada uno, por supuesto) que por mostrar las canciones mismas.

- ¿Qué le da a Marina Gallardo un público en directo? ¿Y ella al público?

- Los conciertos son un poco como volver al momento en que hiciste la canción. Es una sensación extraña, como de retorno. En directo intento que todo sea distinto, de hecho mi principal premisa es la de olvidarme del disco. Me parece un error simularlo, no sólo porque el formato sea distinto, sino porque además no es honesto. Hay un gran trabajo de ensayo a las espaldas, intento adaptarlo todo de la forma más natural posible con la formación que he elegido para que me acompañe, principalmente formada por percusiones, órgano, batería y bajo. Experimento con nuevos sonidos y variaciones... Creo que es la mejor forma de darle vida a las canciones.