JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 02/10/2019

La escudería madrileña Palosanto está moviendo en directo estos días los discos recientemente publicados de dos de sus artistas punteros: la incalificable cantante jienense MARÍA GUADAÑA y el cantautor rock gerundense JOSE DOMINGO. Ambos estarán en el Planta Baja con sus equipos de trabajo mañana jueves 3.

Por razones de longitud profesional presentamos primero a Jose Domingo, un artista itinerante que tiene ya siete discos y que es sobrino del inmenso cantautor levantino Pep Laguarda (háganse un favor, busquen su mítico 'Brossa d'ahir'). Jose Domingo ha contado con voces amigas como las de El Niño de Elche, Soleá Morente y, en el último disco 'Mientras Dios nos mira', de la excelsa María Rodés, mientras que Bunbury se deshace en elogios hacia él. Cada uno de sus trabajos se ha movido lo suficiente para que su álbum de fotos salga agitado entre el rock, psicodelia más o menos mediterránea y, por qué no, flamenco; todo unificado por una de las voces más personales del circuito español (ahora, antes usaba el anglo). Su nuevo álbum está poblado de atmósferas, detalles y poéticas imágenes que en directo se concretarán aún más.

María Guadaña, por su parte, es una mujer que ha estado siempre cerca de la música como saben los habituales del EtnoSur. Recientemente ha dado el paso adelante, entre la canción, la performance, el cabaret o donde sea que se pueda situar su debut 'Remedios paganos', que bien podría haber firmado la añorada Lhasa de Sela o Lydia Lunch, también formar parte de alguno los mejores discos de los muy teatrales Aguaviva. Herminia Martínez es su nombre oficial, pero dentro de María Guadaña muta en un personaje inquietante, mitad Martirio de luto, mitad Corcobado en trance, que come corazones crudos y tiene ese puntillo de cuplé contemporáneo donde siempre viven "las otras". Un debut muy expectante que en directo promete algo tan raro ya en un escenario como emociones, y fuertes.