ARTISTAS, GRUPOS...:
Turmalina | Pablo Donato Pablos | Ángeles Jiménez | Pablo García | Alejandro Martínez | Javi Valverde | Piti Martínez
GÉNEROS, ESTILOS...:
SALAS, FESTIVALES...:
Corker Space | Fun Club | La Clave
SELLOS, DISTRIBUIDORAS, EDITORAS, PROMOTORAS...:
Con su segundo álbum, 'Vértigo y Victoria', editado por Púa Music, la banda gaditana Turmalina dejará de ser prometedora para convertirse en exitosa. Un grupo potente, lleno de colores, que ha trabajado genial en los arreglos del disco junto a su productor, Javi Valverde. Lo podrás comprobar en directo en el Fun Club de Sevilla el 21 de este mes. Reseña del disco por nuestro redactor Valle.
- "Papá, ya me he comido todo bien esta semana y no me gusta el aspecto que tiene".- Mi padre siempre quería que razonara mis respuestas.-
- "Sí, es verdad que te has portado muy bien, pero Juan... ¿tú crees que yo te daría algo que no fuese bueno? ¿Es que no confías en mi? Mírame, las comidas, como todas las cosas, están para disfrutarlas. Hagamos un trato. Pero tienes que ser sincero. Tú pruebas el huevo frito y si no te gusta, nunca más lo probarás ¿Trato hecho?"
- "Vale"
Creo que mi padre pensaba que el universo era como una especie de buffet libre que giraba a su alrededor. Todas las cosas estaban para disfrutarlas. Él lo probaba todo, lo gozaba y resonaban sus carcajadas en el espacio. Muchos me dicen que se fue pronto, pero yo creo que 67 años es el tope que un ser humano puede vivir siendo feliz cada minuto de su existencia. Esta filosofía hizo que mi padre se convirtiera en un ser multicolor y camaleónico. Detectaba la energía en cada situación y adquiría el color que convenía porque ya lo había probado todo. Más que un sabio era un empírico y, si mi padre hubiese sido un mineral, habría sido la turmalina porque es el mineral que más colores refleja.
TURMALINA, además, es el nombre de una banda indie gaditana que, con su segundo álbum, 'Vértigo y Victoria', sacado hace apenas una semana, dejará de ser prometedora para convertirse en exitosa. Es un grupo potente, lleno de matices (colores) que han trabajado genial en los arreglos del disco y provocan cambios de intensidades muy acertados dentro de una atmósfera noise progresiva, expansiva y expresiva. Sus influencias vienen de bandas como Maga, Vetusta Morla, Foo Fighters, Muse, Los Planetas o Love of Lesbian, entre otros.
Destaco la labor, más que rítmica, compositora, del baterista Pablo García que no solo asimila y engulle todos los colores musicales de Turmalina sino que además crea colores nuevos con ritmos, efectos y cambios que enriquecen el paisaje de la banda. Esto es posible porque puede dejar el peso de la base rítmica en un sólido bajista como Alejandro Martínez. Ya sabéis que, a veces, no hay buen Messi si detrás no están Xavi o Iniesta. Pablo Donato Pablos y Ángeles Jiménez son los letristas y los responsables de dar coherencia y lucidez a este universo cromático con sus guitarras y sintetizadores. No puedo olvidarme de la envolvente, motivante y modulante voz de Ángeles que, sin abusar de giros, consigue llevarnos a las dimensiones desde las que habla en sus canciones con acertados dejes "luzcasalinos" en temas como 'Sinónimo de Bien', 'Santos' o 'Catarsis'. Todo el disco es muy especial pero 'Leteo', bien movida, puede convertirse, por su melodía y fuerza, en éxito comercial.
Un capítulo muy destacable del LP 'Vértigo y Victoria' son sus profundas letras que parecen escritas cronológicamente empezando con el tema 'Vértigo' y terminando con el tema 'Victoria'. Desde la inmediatez, viajan y dan saltos dimensionales entre desengaños, atoramientos mentales, recuerdos pasionales, huidas del mundo y caídas avernales frente a un muro que se muestra incondicional e infranqueable y que, aunque inteligentemente no es nombrado, se llama amor.
Ángeles termina el disco cantando: "No hay nada más. Podemos alcanzar la luz y la victoria. No hay nada más que los planes que colapsarán para sentir la euforia". Entonces una atmósfera noise me envuelve con acordes distorsionados al aire y notas secuenciales de sintetizador que acaba en un largo, casi eclesiástico y levitador sonido que se va apagando...
Con este final no puedo evitar sonreír pensando que la luz, la victoria, la gloria, la euforia... Lo que, en definitiva, llamamos cielo, es más cielo desde que llegó mi padre. Seguro que ahora la eternidad, como una especie de buffet libre para probarlo todo, gira a su alrededor y resuenan sus carcajadas mientras Sócrates va detrás de él tomando apuntes como un buen discípulo.
¡Vaya! Con tanto acordarme de mi padre me han entrado muchas ganas... Voy a prepararme un par de huevos fritos.
Anuncio de Google Ads //// ANÚNCIATE AQUÍ
Prometemos no ponernos pesados... ;)
Anuncio de Google Ads //// ANÚNCIATE AQUÍ
Anuncio de Google Ads //// ANÚNCIATE AQUÍ