DANI ILLANA  |  Sevilla, 15/09/2010

Un giro sorprendente y divertido, como el que simboliza el carrusel de su portada, se ha producido en los sevillanos MONTEVIDEO durante el último año. El dúo se ha enriquecido con tres miembros más hasta convertirse en una gran familia, que suena más compacta sin perder su habitual elegancia; ese giro les ha provocado cierto vértigo, pero el resultado les ha gustado tanto que les ha dejado eufóricos, como nos explica Manu C. Villalba, comandante, junto a Damiana, de esta montaña rusa de pop de la que nos hacen partícipes en once canciones deliciosas. Actúan este viernes en la sala La Buena Dicha de Madrid, en la primera fiesta Wild Thing Club y el día 21 en la Malandar de Sevilla.

- Montevideo ahora es "más banda que nunca", ¿es una afirmación que habla más de cuestiones cualitativas que cuantitativas?

- Lo enfocamos más hacia nuestra nueva forma de trabajo, antes éramos sólo dos personas encerradas en un pequeño estudio casero, a medida que íbamos tocando en directo, en nuestras cabezas nos faltaba algo que no cerraba con el sonido que queríamos, así que añadimos una guitarra, después una segunda guitarra (en la gira anterior), pero todavía no nos cerraba del todo, notábamos que nos seguía faltando algo: ese algo llegó con la incorporación de una batería. Así, de dos hemos pasado a ser una familia de cinco miembros (y de vez en cuando llegan los refuerzos de los vientos) que ensayamos en el local y compartimos escenario. Todos hemos participado en 'Vértigo y Euforia', hemos sudado, hemos hecho prácticamente el disco mientras buscábamos nuestro sonido como banda, cada uno aportó su personalidad. Montevideo ya no seríamos los mismos si alguno de los cinco ya no estuviese, no sonaríamos igual. El trabajo en equipo ahora es fundamental.

- Dice la leyenda de vuestro myspace "estamos listos, llegó el momento", versos de 'El futuro será lo que queramos', una afirmación que rebosa confianza en vosotros mismos.

- Era uno de nuestros momentos "eufóricos" tras acabar el álbum. Teníamos ya ganas de volver a los escenarios, de continuar girando; la maquinaria estaba engrasada. Tenemos plena confianza en nosotros mismos y creemos que estamos ofreciendo un buen álbum a todo el que nos escucha, y un buen directo a los que vienen a nuestros conciertos, lo damos todo.

- Lo que parece claro es que 'Orillas plutonianas' es un cambio en vuestro sonido, y parece más un giro que una evolución.

- Creemos que es más una evolución lógica, ese sonido compacto y orgánico de nuestros directos se ha trasladado a nuestro modo de hacer y trabajar. Eso sí, aún estando maduro conserva la frescura necesaria. Cada uno aporta algo diferente al nuevo sonido de Montevideo, que se ha enriquecido mucho. Pero no ha sido algo planeado con nocturnidad y alevosía, ha sido más bien una exigencia del espíritu de directo fresco que se ha apoderado de nosotros. Con 'Vértigo y Euforia' teníamos que asumir un riesgo y ser capaces de afrontarlo con todas las consecuencias ya que hay unas necesidades creativas que están por encima de la comodidad. Evolucionar es positivo. Ahora Montevideo suena distinto: incluso hay destellos de funk, surf y bossanova, cosa que antes hubiese sido impensable.

- El disco gusta, y eso siempre es buena noticia, ¿os lo esperabais mientras lo estabais creando?

- La verdad es que en principio no, a nosotros nos estaba molando mucho el proceso de creación, cómo hacíamos las canciones en el local, ensayando. Por un lado sentíamos un poco de "vértigo" por el cambio, la evolución, pero por otro estábamos cada vez más eufóricos con los resultados, nos gustaban tanto las canciones que sentíamos la necesidad de compartirlas.

- ¿Cómo fue ese proceso?

- Siempre hemos hecho música con los medios que hemos tenido a nuestro alcance. Todo salió de manera muy natural, en los ensayos, desarrollando ideas y tocando, para ello era fundamental salir del estudio casero para trabajar en equipo, en el local de ensayo, compartir ideas, sonidos, canciones, para lograr sentirnos del todo cómodos (o casi) en el directo. Era fundamental conseguir el sonido en el que confluyera la personalidad de cada uno. Así, la batería y bajo se llevan a la perfección y las guitarras y efectos hacen lo propio con el sintetizador. Si esto lo aderezamos con trompetas y fiscornos en algunas canciones, hacen que nos arrimemos aún más al calor de lo acústico, eléctrico y orgánico. Decidimos grabarlo en La Mina con Raúl y que se encargarse de ayudarnos a producirlo. Mientras que de la masterización se encargaría Arturo Vaquero. Todo 'Vértigo y Euforia' al completo es "directable", es un disco que aunque se ha grabado en estudio, con sus métodos típicos, se podría grabar en directo prácticamente sin problemas, no hay artificios, postproducción, o trucos de magia. Sin olvidar que la frescura, espontaneidad y el trabajo en equipo aunando la personalidad de todos están ahora entre nuestras principales filosofías de vida.

- Ya son casi diez años haciendo música con la etiqueta "Montevideo", con los cambios, ¿os planteasteis también cambiar el nombre y empezar de cero?

- Qué va, todos evolucionamos y no somos los mismos con cinco años que con veinte, ¿no?

- Habéis realizado una versión del 'Lost in the supermarket' de The Clash, un grupo con el que quizá no se os asociaría.

- Bueno, nuestras influencias son innumerables, baste como ejemplo la foto de promo en la que mostramos algunos de nuestros discos favoritos, y los Clash son una de estas influencias, tal vez algo más rezagadas o subconscientes, claro. Pero en este caso concreto, la cuestión viene a raíz de los treinta años de la edición del disco original, 'London Calling', y que en Sevilla varias bandas de la escena actual hemos creado y editado bajo el nombre de 'Sevilla Calling', y donde aportamos nuestro granito de arena con 'Perdidos en el super', que nos gustó tanto que decidimos incluirla en nuestro propio disco.

- También sorprenden los remixes de 'Orillas plutonianas'. ¿Era algo buscado o surgió sólo?

- Nos sentimos orgullosos de haber sido remezclados por David Kano, Fizz Moon, Pin&Pon Djs y Oblique, es todo un honor y un lujazo. Ha sido algo que se ha llevado a cabo desde El Genio Equivocado, gran trabajo y acierto, y no serán las únicas...

- ¿Cómo os sentisteis cuando os preseleccionaron para los MTV Awards?

- Pues creo que en general nos quedamos con una sensación de incredulidad, de hecho creo que aún nos dura. Sinceramente no sabemos de qué forma se consigue aparecer ahí, no es como los concursos en los que presentas maquetas y tal, un buen día se inició la votación, y ahí estábamos. Imaginamos que es fruto del esfuerzo que estamos haciendo, del buen disco que estamos presentando y de la posible proyección futura de Montevideo.

- Hace poco pude ver un concierto vuestro en el Vertigo Estival de Martos. ¿Cómo se siente uno cuando gente de la talla de Fernando Alfaro o David Gedge no quitan ojo a tu actuación?

- Gusta sentirte arropado por gente del gremio, no es tanto el pensar "¿le estará gustando?, ¿qué pensará del concierto?" como el que con sus presencias refuercen tus ganas de seguir tocando, dando canciones y conciertos, pensar que algún día tú serás el que animes a los que nos sigan con tu presencia.

- ¿Qué os ha llevado a sacar este largo con la gente de El Genio Equivocado?

- Su forma de ser como personas. Son muy transparentes y sinceros y tenemos una buena relación de plena confianza. Nos sentimos en buenas manos. Están desde hace años en el mundo de la música, y tienen una buena visión emprendedora y empresarial, nos entienden al 100%, y eso es fundamental.

- ¿Cómo os veis vosotros desde dentro la escena sevillana?

- Como otro grupo más de los que hay, que son muchos y enormes, ni mejores ni peores, ni más grandes ni más pequeños, tal vez nosotros ya hemos encontrado un camino y un hueco, pero en Sevilla hay grupos tremendamente buenos; aunque, como pasa en toda buena familia, que siempre hay algunos roces y riñas, y a veces sentimos que no nos arropamos lo suficiente los unos a los otros. Además, Montevideo somos miembro de la Plataforma Sevilla Sound y apostamos por la escena sevillana. Siempre que tenemos la oportunidad "difundimos la palabra".