JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 13/04/2019

Con un cuarto de siglo casi, FUNKDACIÓN es un clásico del circuito de la pista de baile y la bola de espejos. La marca granadina, una auténtica banda universidad en el grado de "músicas negras" acaba de hacer público 'Back to my Skin', su última producción y calienta motores para empezar a montarlo en vivo. Lo harán en el Festival de Zaidín, pero antes lo descorchan en el Planta Baja hoy sábado.

- ¿Lo "Black" sigue siendo "beautiful"?

- Lo "Black" siempre ha sido maravilloso, son sonidos bailables y divertidos. El año que viene cumpliremos 25 años en los escenarios y queremos celebrarlo a lo grande. La música en general "is beautiful" si te apasiona.

- Aunque dicen que los discos están pasados de moda, ustedes insisten...

- (Carcajada) Realmente los discos son algo imprescindible en cualquier grupo de música, diríamos que se ha pasado la moda de consumir música en formatos tradicionales y ahora la venta musical se basa en las nuevas tecnologías y en plataformas digitales algo más frías. Somos amantes de lo tradicional, que el público pueda apreciar, disfrutar y tocar con las manos un disco o un vinilo físico no tiene precio, y mientras insistamos será señal de que estamos vivos musicalmente.

- A estas alturas, ¿se sienten ya una "banda escuela"?

- Pues nos sentimos orgullosos de haber puesto la semilla del funk y de la música negra en Andalucía para que puedan surgir nuevas bandas en estos géneros. Creemos que hemos aportado mucho y no solo musicalmente sino en otros aspectos como fomentar y abrir circuitos específicos. Si añadimos que hemos sido una banda autogestionada desde sus comienzos, muchos nos ven como un grupo a seguir o como un grupo superviviente fuera de las modas que ha sabido reinventarse.

- "Back to"... ¿de vuelta a dónde?

- 'Back to my Skin' representa vuelta a nuestra piel, un regreso a las raíces de la banda. Hemos querido con este nuevo trabajo volver al punto de partida con formación grande incorporando sección de vientos grabando en el primer estudio que nos vio nacer (Gárgola Records de Guadix) y grabar de la forma más tradicional y analógica posible, con objeto de poder recuperar el sonido contundente que nos ha caracterizado durante estos años. Hemos recuperado el sonido sudoroso y "groovadélico" de las primeras grabaciones, soul y funk desgarrador.

- Trabajando un patrón fijo... ¿cuesta no regresar a lo ya hecho?

- Si en algo nos caracterizamos es que, teniendo un estilo muy personal, siempre hemos querido plasmar en los discos una aportación nueva a la música negra. Lo que cuesta es añadir cosas nuevas a estilos que están muy definidos y en eso seguimos.

- Por cierto, que han hecho una portada muy sixtie...

- La portada ha sido diseñada por nuestro amigo y gran artista Manolo Castillo. Representa un homenaje a nuestra trayectoria, a nuestras raíces, a nuestras influencias.

- James Brown estuvo unos años a la sombra. ¿Qué tal su experiencia carcelaria?

- (Carcajada) La experiencia de tocar en la prisión de Albolote fue magnífica. Cuando estábamos actuando para tantísima gente teníamos la sensación de estar aportando muchas cosas a personas que por circunstancias de su vida no están en su mejor momento. Siempre podemos decir aquello de "Jailhouse Funk", y que en esto de la música es importante también ser solidario.

- Llevan muchos años, y casi todos autogestionados, ¡para indies, ustedes!

- Por desgracia muchas bandas y artistas en general se ven obligados a tener que autogestionarse. Nosotros lo llevamos haciendo muchos años. En nuestro caso consideramos que no hemos tenido el reconocimiento institucional o mediático suficiente después de tantos años y aún desconocemos el motivo. El ser artistas independientes tiene cosas muy buenas y otras no tantas.

- ¡Incluso como agitadores! Que nadie diga que no lo han intentado, con festivales en el verano, en invierno...

- "Agitadores del Funk", suena muy bien y nos define a la perfección. Festivales como el Granada en Negro, Entreculturas, Sexy Funk&Soul Fest, Saturday Funk Night... son de cosecha propia. Si algo tenemos es la constancia en el proyecto, y si toca reinventarse así lo haremos: ¡Qué no pare la música!