JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 21/11/2018

MARUJA LIMÓN son Eli Fàbregas, Shelia Quero, Esther González, Vicky Blum y Mila González, cinco barcelonesas de aluvión que se conocieron en el entorno del flamenco, y su primer disco, 'Más de ti', financiado mediante micromecenazgo, ha sido elogiado desde todos los frentes. Una mujer albaicinera imaginada por Quintero y León les ha servido de nombre, y estarán aquí donde vivió la auténtica Maruja Limón haciéndole dos homenajes en directo: en el FNAC (hoy día 21, 19h) y el Planta Baja (mañana día 22, a las 22h).

- Bonito nombre, señoras...

- Sí, la verdad es que poner nombre a un grupo es complicado porque de alguna manera esa es tu primera presentación. Queríamos que sonase a nombre de mujer, y, entre propuestas que íbamos diciendo, Maruja Limón tenía fuerza y era fresca; nos sentimos identificadas.

- Que por cierto cantaba por el Albaicín, ¿no?

- ¡Sí! Y por el Albaicín estaremos nosotras en breve. En unas semanas bajaremos por Andalucía y nos hace mucha ilusión. Tenemos muchas ganas porque la música que hacemos tiene su raíz en el sur.

- "Mujeres que bailan por la noche y trabajan por la mañana". ¿Mandeeeee?

- Pues sí, ese es el presente que vivimos nosotras, trabajar y disfrutar la vida. La mujer ahora dispone de espacios propios y está normalizado un estilo de vida que antes solo disfrutaban los hombres.

- ¿Un grupo como ustedes podría salir en otra ciudad que no fuese Barcelona?

- Seguramente, ¿por qué no? En Barcelona hubo un boom de mestizaje con grupos como Ojos de Brujo, Manu Chao... que abrieron camino a las siguientes generaciones. Aquí se respiraba el ambiente fusión en todos partes. Este hecho es a causa de una gran diversidad cultural, que aporta variedad de lenguajes musicales. Ahora las tecnologías acercan ese ambiente y sonoridad por la península y más allá, así que muchos grupos pueden nutrirse y tener una influencia similar a la nuestra.

- A eso iba, a la tradición Mix de Barcelona... ¿Pesa lo suyo?

- La "tradición mix" puede tener muchas connotaciones, nosotras nos quedamos con la positiva, la variedad y riqueza de los sonidos, y la libertad de crear con respeto pero sin miedo.

- Ay, por dios, Armando Manzanero... ¿le "adoran"?

- Por supuesto. Y por eso está la versión de 'Adoro' en el disco, es un tema que han interpretado muchos artistas y que a la gente le remueve por dentro porque les conecta con alguna vivencia, ¿quién no ha amado con esa intensidad que transmite Armando?

- Sin embargo, tienen una pulsión mucho más cubana que mejicana...

- (Carcajada) Eso es culpa de la percusionista. Elisenda es una fan incondicional de los ritmos latinos y la música cubana, y eso se nota en su sonoridad y en sus formas, además al resto nos encantan esos tumbaos y esas rumbas latinas.

- Hacen también un Mecano... ¿Todo es susceptible de "marujalimonearse"?

- (Risas) Se "marujolimonean" temas que nos gustan, de repente un día viene una de nosotras y dice "¡Ey, quiero probar este tema!" y "pa alante", lo llevamos. Quizá no hemos probado a versionar lírico o Metal y nuestro inglés es bastante, pero oye... ¡nunca digas nunca!

- ¿Qué esperan de Granada, donde estaba la mujer que inspiró a los señores Quintero y León?

- Esperamos disfrutarla al máximo y compartir nuestra música con toda la gente posible. Compartiremos escenario con La Plazuela y tenemos muchas ganas de hacer este mix con ellos, y también de que nos lleven por la ciudad de cañas y tapeo, nos gusta vivir las ciudades, sus calles y sus gentes.

- Por cierto, "señores"... ¿Le ha faltado a la copla autoras?

- Bueno, pues la verdad es que la copla, aunque haya tenido muchas intérpretes femeninas, siempre ha cojeado de autoras, aunque esto no es exclusivo de la copla en sí, en general las autoras femeninas han sido muy pocas en cualquiera de los estilos musicales.

- A eso han venido ustedes, Martirio, Buika, etc.

- ¡Claro que sí! Nosotras estamos ampliando el número de mujeres autoras, aunque no consideramos que tengamos un estilo "coplero". Actualmente hay una generación de mujeres muy potente en la música, y tenemos muchísimas compañeras que están igual que nosotras, equilibrando la balanza.