JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 13/04/2010

Conjurando la maldición de las fechas gafadas, hoy martes y trece saldrá a la venta tras algunos retrasos el octavo disco de LOS PLANETAS, 'Una Ópera Egipcia'. "En el disco hay muchas pinceladas de todos los sonidos del grupo, desde la raíz flamenca adaptada al universo planeta hasta el pop y la experimentación propios de Los Planetas", explican sus editores, el sello Octubre, filial de Sony donde publican ahora los granadinos, recién llegados la semana pasada de actuar en Estados Unidos y México.

En este trabajo reinciden en la elaboración "planetista" de los palos flamencos y exhiben una nueva etapa estética con el dibujante Max en la portada. Cuentan ellos que el nombre viene de un giro gitano antiguo que calificaba de "Opera Egipcia" (nada que ver con castizas zarzuelas de faraones) a todo aquello de categoría superior, se lo oyeron a la Niña de los Peines pero el origen concretamente hace referencia al hecho histórico de que al compositor Verdi le encargasen una ópera ('Aida') con motivo de la inauguración del Canal de Suez. Off the record circularon nombres intermedios como 'Una Obra de Moros' o 'El Libro del Universo'.

Avanzado por el mini 'Cuatro palos' en la recta final del pasado año, aquellas canciones ya anticipaban una nueva vuelta de tuerca en la senda ya estrenada del flamenco con el elogiado 'La leyenda del espacio', en referencia la clásico de Camarón y Kiko Veneno. Flamencorock o Rock andaluz sin mayores referencias en el género que las grabaciones más revolucionadas y pasadas de los Smash de 'Glorieta de los lotos', y nada que ver con Trianas y demás estereotipos del término.

Pero como en el anterior, el flamenco está tan en el fondo, en la estructura y poco más, que formalmente apenas puede detectarse más allá de la inspiración y el interés rítmico. El octavo disco de los granadinos es más abierto, más psicodélico, repetitivo y espacial: hay pasajes rítmicos que nos devuelven a los Neu! más obsesivos, piezas que no desmerecerían en algún disco de Los Relámpagos. También asoma algo la electrónica, entre la fritura de guitarras y las maniobras ruidosas en la penumbra especialidad de la casa y sorprenden algunos usos de efectos catedralicios en las voces.

Como hicieran en 'Y Además Es Imposible', con Irantzu Valencia (La Buena Vida), invitan esta vez a Ana Fernández-Villaverde, La Bien Querida, para hacer el contrapunto femenino a la voz de Jota en 'La Veleta' y 'No Sé Cómo Te Atreves', emblema del disco esta última y saludable contraste vocal muy de agradecer. Otros invitados ilustres han sido Antonio Arias o Enrique Morente, que asoma por varios rincones.

El álbum recupera también 'Soy un pobre granaíno', incluida en el sampler 'Principios básicos de astronomía', como también se retoma el 'Romance de Juan de Osuna'. Lo demás es material nuevo: 'La Llave de Oro' (unos tangos instrumentales de entrada), 'Una corona de Estrellas' (romera), 'Siete Faroles' (cantiña cordobesa), 'No Sé Cómo Te Atreves', 'Señora de las Alturas' (alegrías), 'La Veleta', 'Atravesando los Montes' (malagueña), 'Virgen de la Soledad' (saeta), 'La Pastora Divina' y 'Los Poetas', una suite in crescendo ésta última de casi diez minutos e inspirada en las lecturas de El Corán. La leyenda continúa.