VALLE  |  Madrid, 04/04/2018

Del 24 de abril de 1957 al 7 de enero del 2013 se estuvo emitiendo en la BBC el que quizás haya sido el programa más longevo de la T.V., un célebre informativo mensual de astronomía llamado 'The Sky at Night' que fue presentado por el carismático astrónomo y presentador Patrick Moore. Este excéntrico comunicador adquirió una popularidad enorme y su audiencia subía progresivamente. Pero no todo fueron éxitos en su larga trayectoria y, en el programa de abril de 1976, Patrick Moore informó a los televidentes que al día siguiente a las 09:47 Plutón se alinearía en la órbita de Júpiter de tal manera que se produciría una atracción gravitacional creciente tan grande que se notaría en nuestro planeta. Aseguró que si justo a esa hora la gente saltaba se sentirían más livianos y podrían tener la sensación de flotar. Miles de británicos estuvieron saltando ridículamente al día siguiente a las 09:47 para nada. Por supuesto, la reputación de Patrick Moore en el ámbito de la astronomía cayó en picado porque ningún astrónomo serio puede intentar convencer a nadie de que un planeta tan pequeño y lejano como Plutón ejerza la más mínima influencia sobre La Tierra se coloque donde se coloque. Pero la fama anterior adquirida por el presentador le sirvió para seguir al frente del programa hasta que murió en el año 2012.

Parece que la fama anterior adquirida como guitarrista de Hombres G le ha servido a Rafa Gutiérrez para dar a luz un nuevo proyecto llamado MR. BANKY. La impresión que da es que ha contratado a unos cuantos músicos sumisos que sin rechistar realizan los disparatados arreglos que a Rafa se le han ido ocurriendo. Empezamos ya mal porque el nombre del álbum es 'Mr. Banky en concierto'. Es cierto y se lo agradezco que los temas están grabados en directo. Sin embargo, no están en un concierto. No hay público, no están en ninguna sala, el sonido no está al aire... Simplemente han sido grabados en un estudio en directo. No sabemos cuántos intentos han necesitado, a lo mejor les salió bien a la primera pero desde luego el nombre del disco de por sí es una tomadura de pelo. El problema es que esa mentirijilla es lo menos importante porque este trabajo de Mr. Banky es un despropósito de principio a fin.

La voz de Rafa Gutiérrez no tiene personalidad, no tiene matices y suena desganada. No es cantante. Ser cantante no es solo coger un micrófono, para eso ya están los karaokes. Estoy seguro que Rafa conoce a muchísimos vocalistas que podrían poner voz a su proyecto pero el hecho de que uno sea famoso no le da derecho a hacer lo que quiera o ser lo que quiera. Hay que hacerlo bien, con unas propiedades que puedan resultar atractivas y tener una actitud. El problema es que lo de la voz es lo menos importante porque el desbarajuste total llega en los arreglos de las canciones. Ninguna tiene una línea lógica, ni una secuencia argumental, ni un estilo definido. A ver si me explico, me encantan los cambios de ritmo y de parámetros que sorprenden, que rompen, que seducen... Sin embargo, lo que hace Mr. Banky parece pensado por un niño. Sin venir a cuento se ponen lentos con un coro absurdo pero luego eso para y vuelven al principio. O en mitad aceleran sin ninguna fuerza y se marcan un rocanrol con otros acordes... Es todo un sin sentido. El problema es que lo de los arreglos es lo menos importante porque lo ridículo está en las letras y en las melodías. Ahí os invito que las escuchéis porque a veces te ríes como te ríes de los chistes malos. Empieza una canción con unos acordes desfasados que pretenden crear suspense o miedo y a continuación se ponen a susurrar la palabra "salvaje" con tono de misterio. Es como cuando en el concurso del 'Un, dos, tres' dedicaban algún programa al terror y las azafatas se vestían de monstruos, zombies o vampiros y cantaban una canción. Es infantil, incoherente y poco inteligente grabar eso. El estribillo con los coros de la canción 'Decisión' también causa risa y las letras, en general, son un quiero y no puedo. Mr. Banky intenta ser profundo y canta: "Hay una fuerza en tu interior, es una gran provocación". Y acelerándose te suelta a continuación: "quiero bailar contigo". El colmo ya es cuando dice: "siempre estás preciosa y a mí me gustas tanto sin pintar". ¡Menuda declaración! Por cierto, el tema, como no podía ser de otra manera, se llama 'La chica de mis sueños'. Si intenta hacer metáforas es mucho peor: "Cae la lluvia sobre el mar, transparente". ¿Pero dónde está la transparencia en la imagen de la lluvia sobre el mar? Y a continuación, como le toca rimar con "mar" y no se le ocurre nada pues dice: "me da igual". O evidencias tan tontas como: "Guardo tus flores cerca del sol donde se marchitarán con tanto calor". Con Mr. Banky podemos descubrir la belleza de la poesía porque "poco" rima con "loco" y "preciosa" con "cosa"... No, esto no se puede permitir en un señor con una trayectoria tan larga y que dentro de unos días (felicidades de corazón) va a cumplir 58 tacos.

Si esto fuera de un grupo de veinteañeros sin experiencia, lo ignoraría y no me molestaría en escribir esta crítica. Sin embargo, al ser Rafa Gutiérrez, quise creer en un supuesto proyecto maduro y consolidado como lo es su trayectoria con Hombres G y, al igual que los británicos, me puse a saltar a ver si ocurría algo. Pero no, es otra estafa que, a pesar de su fama, no debería convencer a nadie.

Lo curioso es que en ese abril de 1976, había tanta gente que creía en Patrick Moore que centenares de británicos aseguraron que habían notado cierta ingravidez en sus saltos. De la misma forma, este proyecto sin sentido de Rafa Gutiérrez ya tiene un muy numeroso club de fans.

No obstante, solo hay que escucharlo para ver que, además de que no aporta nada, es un desbarajuste total, un trabajo sin personalidad y un quiero y no puedo.

No pasa nada, coge tu guitarra que la tocas muy bien y vuelve tranquilamente a tus Hombres G donde os habéis ganado por vuestra historia y frescura millones de fans en Europa y América. 

Rafa, en serio, abandona este proyecto porque Plutón sigue siendo muy pequeño y está demasiado lejos para que nos influya lo coloques donde lo coloques.