JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 13/02/2018

Protagonistas de muy buenos conciertos, ya cuatro en Granada o cinco si contamos el de "Mateo" Caws, su líder, llega hoy al Palacio de Congresos el trío neoyorquino (ahora quinteto en estas actuaciones) NADA SURF. Quince años después de que saliera su disco 'Let Go' han retomado aquellas canciones para hacer una gira especial en la que recordarán el disco entero (con una segunda parte de concierto ya "normal"). Paralelamente, ese mismo contenido ha tenido dos homenajes colectivos a ambos lados del Atlántico, que en la zona hispana ha contado con los granadinos Lagartija Nick, Niños Mutantes y Lori Meyers entre doce grupos reunidos para el álbum 'Tu aura brilla más'. En la Sala Falla (no confundir con el auditorio alhambreño) del Palacio de Congresos.

- ¿Quince años es un buen número redondeo para volver a un disco? ¿Y por qué ahora sí con 'Let Go' y no el año pasado con los veinte de 'High/Low'?

- Sí hombre, la verdad es que se pueden festejar muchas cosas distintas... Pero este disco tiene algo especial, porque el primer disco tienes toda la vida para escribirlo. En el segundo sufrimos mucho con la presión de la industria, y el tercero lo tuvimos que sacar nosotros mismos. Y al cabo de tres años de pausa conseguimos nuestros derechos y decidimos grabar. Ese tiempo fue como tener otra oportunidad de hacer nuevamente un "primer disco"; volvimos a ser normales, yo regresé a la informática, Mateo se puso a vender discos... Un tiempo que nos permitió llevar una vida normal y tener experiencias normales que luego pudimos contar en canciones. Ese disco fue el que definió definitivamente al grupo. En esta etapa seguimos ahora. Y es una gozada ser telonero y cabeza de cartel a la vez (risas).

- A 'Let Go' le han hecho también un disco de homenaje una larga serie de compañeros. ¿Emocionado? ¿Alguna sorpresa con las re-lecturas?

- Se le ocurrió a nuestro manager hacer un disco de tributo a nosotros mismos (risas) y dijimos que no obviamente. Pero luego resultó que era un trabajo benéfico para una ONG (ACLU The Pablove Foundation). Lo comentamos con grupos amigos y ha quedado muy chulo. Luego he preguntado a algunos amigos españoles que si les hubiera gustado y me han dicho que sí, y esta semana se pone a la venta. Hasta he llorado oyendo algunas cosas, se lo han currado muchísimo, han hecho traducciones al francés o el castellano, no puedo creer que sean canciones nuestras. Es un honor de la leche.

- Por cierto, si no falla la memoria, es la cuarta vez que vienen por Granada... ¿Nos tienen en sus oraciones?

- Estoy muy feliz porque me he criado pasando tres meses al año en Cádiz, mi padre es de Granada... Y he tenido en Andalucía algunos de los conciertos más cachondos de mi vida... (risas) ¡Una vez llegué a la Copera en taxi desde Sevilla cinco minutos antes del concierto porque me había ido a un after y a la hora de salir un camión tapaba la puerta! (carcajada). Ahora iremos después del concierto al Bar de Eric a tomar copas, que tiene mejor salida a la calle (risas).

- El año pasado salía su segundo disco en directo, ¡¡pero con orquesta!! ¿Cómo fue la experiencia?

- Sí, fue con la de la Radio Nacional de Austria y la Deutsches Filmorchester Babelsberg, de al lado de Berlín, donde rodaron las primera películas europeas como 'Nosferatu'... La experiencia de tocar con esos músicos fue increíble. Nos reíamos porque les decíamos que eran músicos "de verdad", y ellos nos decían que nosotros también porque componíamos y no teníamos nada que leer (se refiere a partituras) porque las llevamos dentro... Fue genial, porque además tenemos un repertorio tan largo que pudimos escoger las mejores para ser adaptadas, que no todas se dejan, y si lo hacen no van a quedar del todo bien.

- Ocho discos en 21 años... ¿No es más bien poco?

- Bueno, nueve, según como se cuente. Sabes lo que pasa, que a nosotros nos gusta mucho tocar. La gira de 'Let go' duró un año y diez meses... Haciendo giras como esas no sobra mucho tiempo para componer. El sello discográfico que tuvimos al principio presionaba mucho para hacer un tercer disco rápidamente, pero Mateo pensó que daba igual cuándo saliera un disco, que lo que se recordaría es si el disco era bueno. Y tenía razón porque aquí estamos quince años después hablado de él. Desde entonces hemos aprendido a utilizar el tiempo de otra manera y a ser muy autocríticos.

- Recordar a Nada Surf es hacerlo sobre aquel momento en el que con 'Popular' parecían que iban a ser la siguiente banda de estadios... ¿Cómo asimilaron aquel subidón?

- Aquel fue un momento rarísimo. Estábamos flipados de ser números uno en la MTV. Menos mal que no teníamos veinte años sino treinta o más y nos lo tomamos con calma. Sabíamos que era una anomalía y no era lo normal. Cuando se hace estadística, sobre la lluvia o lo que sea y el resultado es en un punto muy superior al habitual se considera una aberración y no se tiene en cuenta. Con Nada Surf y esa canción fue una aberración.

- Aunque en directo han frecuentado, aquí también, muchos festivales. En Granada siempre han tocado en salas. ¿Nos hemos perdido lo mejor de Nada Surf o al contrario, somos unos privilegiados por tenerlos al alcance de la mano?

- No somos un grupo de radiofórmula ni de estadio, eso no es normal para nosotros. Efectivamente tocar para cuarenta mil personas está muy bien pero no es lo mío. Hemos tenido una carrera normal y fantástica, subiendo poco a poco. No nos conocen en las calles ni en los aeropuertos, alguien de vez en cuando sí nos saluda, y mola oírte en Radio 3 o en un bar pero sin agobios... Somos más de rocanrol, más de garito.

- En aquella ocasión del taxi lució, ya muy ajado, el mismo bajo que le regaló su familia... ¿Amor de hijo, que el Fender le salió bueno, o ambas cosas?

- (Risas) Vendí el que tenía de pequeño y me faltaba dinero para uno bueno, así que mi madre me lo regaló cuando cumplí los dieciséis. Y lo sigo tocando, sí, lo intento destrozar cada noche pero no hay manera, sigue vivo (risas).

- En nuestra tele hemos escuchado a Lennon anunciando coches y últimamente a Dylan bancos o Black Sabbath todoterrenos... ¿Qué les gustaría que se anunciase con una canción suya?

- (Carcajada) Hicimos uno de agua mineral en Italia, y estuvimos a punto de poner música a otro de los huevos Kinder (risas). Hace muy poco se anuncia un móvil Samsung con una versión nuestra de Pixies. Yo soy tan forofo de Apple, que sería un gran placer... Y no te digo nada de ponerle música a cualquier cerveza española, con lo cervecero que soy (y recita una letanía de marcas de cervezas españolas; si no todas, casi todas).

- La última vez que le entrevistamos por aquí sorprendió con el conocimiento que tenía de ¡¡Lagartija Nick!! ¿Sigue a los granadinos de cerca?

- Son mis héroes, fue una casualidad que tocaran en Madrid con su nuevo disco, y allí que me fui, a la sala Caracol para escucharlos. Estuvieron supersimpatiquísimos conmigo y tuve la gran suerte de que Antonio me dejó tocar el bajo... ¡Su bajo! ¡Su línea de bajo!... Yo estaba como un crío emocionadísimo. Soy un fans suyo de toda la vida y su último disco me vuelve loco. Les profeso mucha admiración y mucho cariño.