JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 09/11/2017

Lo que empezó como un encuentro pandillero y casual de dos grupos tan dispares, musical y generacionalmente, como Arizona Baby y Los Coronas para las actuaciones de 'Dos Bandas Y Un Destino' se ha convirtió cita intermitente (por sus otras marcas) pero estable. Una fulgurante trayectoria de llenos que quedó reflejada en un doble DVD/CD 'El Concierto', que recogía una de esas noches históricas en Joy Eslava, rebosando hasta los topes y que parecía el final de la UTE (Unión Temporal de Empresas). Pero tampoco. Varios años después, 'Nueva Dimensión Vital' los ha devuelto al giradiscos y los escenarios, con unos feroces (y muy divertidos) directos. Si no se lo creen acudan al Aliatar el 10 de noviembre a eso de las 22h y juzguen.

- Iba a ser para un rato pero se me han animado...

- Javier Vielba: ¡Siempre a tope! Como en toda buena fiesta, la cosa se lía.

- Fernando Pardo: Somos fáciles de animar y nos hemos caído bien. Hemos hecho un buen grupo de muchas coñas y pocas penas y esas uniones dan vida, mucha vida.

- Y una vez superado el calentón, ¿cómo llevan la fase de meseta?

- J.V.: Contentos con el golpe de timón que dimos en 'Nueva Dimensión Vital' y con ganas de mostrar los temas del nuevo miniálbum.

- FP: Seguimos aprendiendo de las lecciones que nos da la vida y gozando de las cosas como un viajante de comercio, siempre en tránsito y muy poco anclados a las mierdas ajenas. La fases de meseta vibran suave y se disfrutan suave, como una buena tarde con los colegas. Las subidas y las bajadas son fases de esquizofrenia en las que el ego sufre y el sinsentido se impone.

- La "Unión temporal de empresas": Corizonas, Sex Museum, Los Coronas, Arizona Baby, El Meister... ¿funciona a la carta o hay prioridades?

- J.V.: Va por temporadas. Somos como Tarzán: de liana en liana y sin tocar nunca el suelo.

- F.P.: Nos organizamos bien, somos una cooperativa de operarios cualificados que solo improvisa sobre el escenario, nuestra eficiencia es nuestro progreso.

- Y si no hay dos sin tres... por ejemplo "Corizonastanich", ¿suena bien?

- J.V.: Ya hemos colaborado alguna vez, todos pertenecemos a la misma familia musical. Seguro que habrá más colaboraciones futuras.

- F.P.: Hay muy buena onda, saldría algo bueno seguro.

- Entonces serían ya cuatro guitarristas en escena... solo Robert Fripp se ha atrevido con más...

- J.V: Habría que compensar con 2 bajistas y 3 baterías.

- F.P.: Podríamos tocar juntos hasta 30 guitarristas en un escenario sin problema, nos gusta jugar y compartir y además nos va la marcha. El que más sufriría sería el técnico de sonido. Más complicado veo juntar a dos cantantes...

- En directo, al borde del escenario hay dos tipos bien lenguados, ¿se dan turnos para hablar?

- J.V: Fluye con naturalidad, Fernando y yo hasta estamos pensando en montar un programa juntos... empezaremos por un canal de YouTube con nuestras chaladuras.

- F.P.: Que son muchas. A mí últimamente solo me escuchan profundamente mis mascotas. Creo que debería que cambiar de audiencia. O de medicación.

- Hay un grupo en Granada que abre con un discurso de Hitler, Los Planetas incorporan una letanía de un "trapero", ustedes lo hacen con 'El Gran dictador'... ¿otras palabras que les merecieran abrir sus discos o conciertos?

- J.V: Cualquier discurso de fin de programa de Iker Jiménez o de Jesús Quintero.

- F.P.: Yo sigo entregado a Bill Hicks, cualquier monólogo suyo serviría para empezar o para acabar un concierto, de hecho la aventura de 'Dos Bandas y un Destino' empezaba con uno suyo y creo que tuvo más influencia en toda esa etapa que la propia música.

- "La música es mi religión" dijeron en la última entrevista que hicieron por aquí... ¡Ave María purísima... si va a ser cierto lo del punto predicador...!

- J.V: Efectivamente, somos muy devotos. Y muy de botas.

- F.P.: La música es mi religión y mucho más. Es un refugio íntimo que nunca me decepciona, una droga que me ayuda a llegar a estados de euforia o emoción o melancolía y a desear alejarme de toda compañía para disfrutar solo y transportarme. Disfrute íntimo y sin palabras, que nunca me parece demasiado y nunca pide nada a cambio, ni sermonea, ni deja residuo, ni cansa. El perfecto opiáceo. No conozco persona o religión que me provoque lo mismo. Por eso no me gusta conocer a los músicos cuya música admiro, nunca están a la altura de sus canciones. El punto predicador para otro, yo soy demasiado egoísta como para compartir mi dosis.

- También me dijeron que dejaron muchas sobras en el último disco, ¿están en camino o siguen en la nevera sin fecha de consumo recomendado?

- J.V.: ¡No son sobras! Aquí todo es magro. Hay un miniálbum en camino que será una especie de eslabón entre 'The news today' y 'Nueva Dimensión Vital'. Cronología a lo Tarantino.