JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 13/11/2011

Aunque muchos le hemos asociado al circuito de las músicas del mundo, donde nos llegó por primera vez por estas latitudes, RAY LEMA no ha olvidado el jazz como uno de sus principales nutrientes artísticos; y aquí viene buscando su esencia, a trío con Francis Lassus en la batería y Xavier Zolli al bajo, una plaza esta última habitualmente ocupada por nuestro ya familiar Etienne Mbappe.

Lema es uno de los titanes de la música africana, y en ternos globales por encima del soukous zaireño que promovió en los años ochenta. Nacido en Zaire en el año 1946, estudió piano clásico mientras tocaba en lo los bares de Kinshasa como guitarrista y teclista acompañante de artistas de la talla de Tabu Ley Rochereau, Abeti y Papa Bemba. Con ellos se daría a conocer en todo le mundo por ese puerto de exportación global para la musica del mundo que es París. En 1974 el gobierno encargó a Lema la creación del ballet nacional zaireño e inició un exhaustivo periodo de investigación en la música y danzas tradicionales de las más de 250 etnias del Zaire, un trabajo luego becado para seguir rastreando en los USA el camino seguido por esas músicas. Ya no hubo paso atrás: allí conoció a sus ídolos de entonces: Marvin Gaye, Herbie Hancock... y luego Prince, incorporando el R&B, el soul, el funk y el jazz a su música, en sus manos como géneros de "ida y vuelta".

Residiendo ya en Europa ha grabado con innumerables artistas, hasta de pop, y haciendo giras que como las de Manu Dibango o Chico Cesar pasaron por España. En 2004 Lema recuperó su carrera grabando a piano solo ('Mizila') y aunque lo último ha sido una producción sinfónica (con la Orquesta de Sao Paulo), hay que destacar los discos 'Paradox' de 2007, rindiendo un homenaje a Ali Farka Toure, y más recientemente un vibrante trabajo con la Saka Saka Orchestra, un proyecto colectivo casi tribal de regreso a los ritmos zaireños. "La música es un juego social donde cada miembro de la tribu tiene su propio espacio", dice Lema, "y ese es el propósito del juego, encontrar el lugar de uno en la sociedad". Y el pianista lo buscó en África, América y Europa, y ahora en Asia: su página web está también traducida al chino.

Esta noche, en el Teatro Isabel la Católica de Granada, dentro del programa central del XXXII Festival Internacional de Jazz de Granada.