MIGUEL LOPOTT  |  Madrid, 21/05/2011

Basado en el texto de Maxim Gorki y estrenada en Rusia en unos tiempos (1904) de tanta "indignación" como los actuales, contemplamos cómo la búsqueda sigue siendo la misma, la dignidad del ser humano como valor supremo. Así Miguel del Arco y su equipo (grandes triunfadores de los Premios Max 2011 con la obra 'La función por hacer') nos presentan un particular verano, esa estación idealizada, creada por la naturaleza para el ocio, el disfrute, la felicidad y que convierte en fracaso cualquier resultado distinto del fin último de pasarlo bien. En esta estación convivirán once personajes atormentados con sus propios objetivos y miserias. Un tormento que detona en una convulsiva convivencia de altibajos anímicos, de armonía y confrontación, de amores y odios, de pasiones y deslealtades. De esta manera, en clave de comedia, asistimos a un drama que ahonda en la manera de enfrentarnos a los miedos interiores, a nuestras relaciones y a nuestra propia vida, en un tiempo estival en el que es difícil escondernos tras el escudo de la rutina diaria.

Durante dos horas y media asistiremos, en un escenario dispuesto a modo de ring rodeado de butacas, al ir y venir de situaciones e historias entrecruzadas en las que unos púgiles, bajo el paraguas de turistas, golpean, esquivan y hasta noquean al adversario, unas veces en el campo, otras en la playa, en el green de golf, en el salón... pero siempre muy próximas al espectador .

Los variopintos personajes están más que conseguidos e intencionadamente estereotipados. Brillantes las actuaciones de Bárbara Lennie, Israel Elejalde y Manuela Paso que sobresalen en este elenco de también sobresalientes actores. La escenografía minimalista y funcional logra recrear con suavidad y sin artificios cada ambiente. El resultado es una velada teatral de calado avalada por la avanzada dirección de Miguel del Arco.

Aún podemos disfrutrar de este 'Summertime' en el Teatro de la Abadía, en Madrid, hasta el 29 de mayo y a partir de septiembre (con las entradas ya a la venta). Los meses de en medio ya sabéis, son para ser felices.