JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 04/11/2010

Blood, Sweat & Tears, junto con otras pocas bandas como Chicago, Electric Flag o Flock introdujeron el jazz en el pujante mundo del rock en los fértiles años sesenta. Fundadores del, como se decía entonces, "jazz rock", la combinación derivaría y degeneraría en la fusión ya cargada de excesos a finales de los setenta. Pecos Beck y la Tito Poyatos Band (en la foto), que ya habían utilizado ese registro para hacer su loado tributo a Beatles desde una óptica de robusto jazzrock, destapan definitivamente ya sus cartas y van directamente a las madres el cordero: el grupo que fundaron Al Kooper, Steve Katz y David Clayton Thomas, una marca que en la actualidad todavía funciona pero como una franquicia de repertorio. Pecos Beck y la Tito Poyatos Band inauguran el mes del jazz en Granada con el tradicional UNIVERSIJAZZ, esta noche de jueves, un día antes de que abra la edición oficial, a las 20h en la Escuela de Arquitectura Técnica.

La pregunta era obligada: "nos fijamos en Blood, Sweat & Tears porque, junto a los Beatles, es la otra escuela que personalmente he escuchado desde pequeño hasta que me interesé por la música afrocubana. De Blood, Sweat & Tears me atrajo sus imponentes arreglos de metales y sus vertiginosos cambios rítmicos que hacen que el oyente disfrute musicalmente una barbaridad"; "un formato", sigue Luis Poyatos, tecladista y arreglista del proyecto, "creado basándome en el proyecto Cubop Latinjazz, donde lo único que tenia que cambiar era el estilo y añadir una voz especial, que nadie puede hacer mejor que Pecos Beck".

Y es cierto que la garganta del cantante francés tiene ese punto grave de rugidor nocturno que encaja perfectamente en semejante gama de timbres testosterónicos de apuradores profesionales de la madrugada como el de Clayton Thomas y, por qué no, el de Tom Waits... ¿Acaso una próxima entrega? "Bueno, Tom Waits no tiene para mí esa musicalidad de Big Band, y aunque tuvo sus años de club y sus textos son maravillosos, los arreglos de sus canciones están concebidos más de apoyo a la voz; en cambio, Blood, Sweat & Tears o el grupo Chicago, u otras bandas emblemáticas de aquella época, hacen que los metales tomen mayor protagonismo y enriquezcan a ese género que, recordando al famoso critico de jazz Joachim Berendt, se llamó de las "Bigbands" del rock".