JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 09/06/2010

Sin cumplir aún la treintena, la vida de MICAH P. HINSON da para un guión de cine que no tardará mucho en llegar. Nacido en Memphis en 1981, entre esa fecha y 2004 cuando debutó como compositor y cantautor, al pobre Micah le ha pasado de todo. Nacido el mismo día en que tirotearon al presidente Reegan y criado en una familia de riguroso y represivo fervor religioso, el gafoso de Tenesse, por si fuera poco que le saliera artista a su integrista padre, perdió la cabeza en plena adolescencia tras una madura ex modelo de Vogue, y esa locura por la señora Robinson del siglo XXI le condujo cuesta abajo y a todo trapo por el tobogán de la autodestrucción, en una caída libre de riesgo, drogas, delitos... hasta que terminó el viaje abruptamente en la cárcel. Al salir de prisión, con 19 años, fue repudiado por su familia y durante otra etapa vivió como un vagabundo de ciudad en ciudad. Pero, como diría el señor Hinson (senior) "Dios aprieta pero no ahoga", y aunque el joven Micah estuviera ya bastante morado, se salvó agarrándose al salvavidas que le mandaron desde Inglaterra los propietarios de un sello discográfico de Glasgow, quienes tras una serie muy improbable de casualidades llegaron a él y le invitaron a grabar su primer disco.

Se dio a conocer con ese 'Micah P. Hinson and the gospel of progress' que publicó con tan sólo 23 años, siendo un debut aclamado por prácticamente la totalidad de la prensa internacional. Aunque asegura que no es precisamente la música tradicional americana lo que más ha escuchado, sea por su rugosidad vocal de abuelo superviviente, o por la ambientación austera y sobria de sus composiciones, se le incluye en la cercanía de los protagonistas del alt-country contemporáneo, del grave Johnny Cash en sus más oscuros que claros, de un Kurt Wagner masticando la palabras sílaba a sílaba o de la colección de cronistas del otro lado que cuentan sus cosas con ásperas voces amarillas de nicotina y llenas de grietas, sean Cohen, Tom Waits o Nick Cave. Y todo eso con 29 tacos.

Por aquí ha tenido la promoción añadida de la película 'After', cuyo director Alberto Jiménez utilizó la penumbra emocional de sus canciones para iluminar (poco, está claro) sus personajes. Por su parte Micah no ha da mucha tregua a sus (cada vez más) seguidores, y así sin dejar siquiera un año reposar 'All dresed up and semelling of Stangers', su disco de versiones, editó para esta primavera una docena nueva de canciones en formato doble bajo el título de 'Micah P. Hinson And The Pioneer Saboteurs' y con una imponente portada con una pistolera sin más ropa que un poco de cinta aislante. Hoy miércoles 9 seguro que lo avanza en el Teatro Isidoro Máiquez de Granada a las 21h.