JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 25/05/2010

Se les han quedado pequeñas las salas de Granada. Los LORI MEYERS coquetean con un público que está a un paso de ser mayoritario, y es muy grato poder contar que dejaron sin espacio la Copera, y que de seguir así su progresión, los lojeños tendrán que duplicar fechas ya que no hay sitios más grandes donde tocar. Y eso en cuanto a cantidad, que en lo otro, además, dieron un muy buen concierto.

Precedidos por el pop retro-electrónico e intergeneracional del dúo/grupo Montevideo (son de ahora pero suenan a siempre) y de una acrobática barwoman de la marca patrocinadora, los Lori asomaron con sus mejores galas (¡con sus dos cantantes encorbatados!) para estrenar 'Cuando el destino nos alcance' en casa, donde ya no es noticia que juegan siempre para ganar.

Comenzar con 'Nuevos tiempos' pudiera sugerir que reclaman su autonomía también en directo, pero no, los experimentos los dejan para el laboratorio y en concierto apenas asoman algunos ruiditos envasados (en 'Condicional Hipotética' por ejemplo) siendo el instrumental de tracción manual y los floridos juegos vocales las características de siempre en el grupo. Hay que añadir, en favor del (siempre anónimo) responsable del sonido que el audio rozó (depende del punto de escucha obviamente) la alta fidelidad, sirva de ejemplo que el arriba firmante, por primera vez en este grupo ha escuchado en su sitio al conguero, cuyo sutil toque habitualmente se perdía sepultado por sus compañeros.

Si en disco han dado un barniz distinto bruñido a maquinilla a sus canciones nuevas, no es menos cierto que ejemplares como 'Corazón elocuente' con una intro swingueante y unos obvios coros playeros demuestran que en esencia, siguen siendo los mismos; canciones como 'Enhorabuena...' (en plan cantautor y convertida en una celebración coral ya con el pescado vendido) o 'Mi realidad' encajan perfectamente en el cancionero oficial y van camino de ser himnos tan coreables como 'Mujer esponja', 'Luces de neón', 'Dilema', e incluso la final 'Viaje de estudios', los tres momentos en modo "venid y vamos todos" del concierto.

Si ya para vídeo antiguo se vistieron de jugadores del Granada C.F., no pudo faltar su alusión, camiseta incluida, al equipo "nacional" de la ciudad; mención especial y solidaria hacia los esforzados promocionables de tercera división desde un grupo que acaba de acceder por derecho a la primera de la música española. Y contarlo, ya digo, es un placer.