JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 19/10/2018

Normalmente, a la izquierda del escenario según se mira, en conciertos de Lori Meyers, Antonio Arias, Tarik, Los Portazos o Soleá Morente estaba un guitarrista alto y de porte quijotesco, era y es Miguel Martín, que ahora debuta en solitario tras la denominación de UNIDAD Y ARMONÍA. Junto a él un buen número de amigos y compañeros que no se han querido perder ese comienzo, desde Los Planetas que ponen el disco en circulación a ilustres del pop que le escoltan armónicamente hacia la unidad. Hoy viernes 19 en el Planta Baja de Granada (22h).

- Unidad y Armonía parece que se hace marca estable, ¿no?

- Lo que empezó siendo un homenaje a Módulos al final se quedó como una continuación. Hay mucha gente que se pensaba que el título del disco era ese, pero era el nombre de todos los que nos juntamos para grabar ese álbum, además este nuevo proyecto estaba impregnado del espíritu y de las cosas que aprendí grabando el tributo.

- ¿Y por qué un nombre tan abstracto (¡y tan Cohelo!) tras el que situarse...?

- Detrás de Unidad y Armonía no se esconde ninguna secta religiosa, aunque en redes sociales nos han empezado a seguir y a preguntar gente muy espiritual y mística, es normal, la portada sale un árbol en un fondo naranja, hay títulos en él que se llaman 'La Luz', 'Equilibrio'... Y el toque lisérgico lo tiene... Unidad, Unity, fue el módulo espacial lanzado en 1991 al espacio por la NASA para formar parte de la Estación Espacial Internacional. Armonía, Harmony, es el módulo espacial de fabricación italiana que alcanzó la Estación Espacial en 2007. Unidad y Armonía quedaron ensamblados en órbita. Esta es la explicación al nombre.

- Lo señores unidos y armónicos, ¿quiénes son? ¿O son todo maniobras orquestales en la soledad?

- Hace un par de años empecé a componer y a maquetar algunas ideas que tenía y en ese momento llamé a Alonso Díaz de Napoleón Solo para que hiciera la labor de productor. En la grabación del disco básicamente estuvimos tres personas, Alonso de que tocó algunos teclados, Popi González a la batería y yo, que grabé el resto de instrumentos, aunque también está José Ubago y Natalia Martín, mi hermana, y la mezcla la hizo JASS. A la hora del directo he ido reclutando a los músicos, Popi González, Julián Méndez, Toni Jiménez, Carlos Marqués y Roberto Escudero.

- La experiencia Módulos, ¿qué poso le ha dejado?

- En el disco de Módulos aprendí mucho, fue un proyecto sin ninguna presión y rodeado de buenos músicos que me ayudaron. Todo esto me hizo ver que podía dirigir un proyecto musical y tenía claro que lo siguiente era un disco en solitario. Tampoco nos vamos a olvidar de Módulos en esta nueva etapa, puesto que en los directos hemos rescatado algunos temas que encajan a la perfección en el nuevo repertorio. También me llevo un buen recuerdo, hace unos meses adquirí una Gretsch Tennessean de 1965, la guitarra con la que Pepe Robles compuso la canciones de Módulos y lucía en su época con Los Ángeles, una reliquia que estoy utilizando en esta nueva etapa.

- Sin embargo lo que ahora ha grabado es muy... ¿'Arnold Layne'?

- (Carcajada) Hay mucha influencia de los primeros Pink Floyd y de la psicodelia de los 60's pero también de algunos artistas modernos como Jacco Gardner, Allah-las, Holy Wave, Ultimate Painting... que me inspiraron para este disco.

- A ver, mójese: ¿Pepe Robles o Syd Barrett?

- ¿A quién quieres más, a papá o a mamá? Está claro que Módulos entraron a formar parte de mi vida en el momento que me embarqué en ese proyecto, aparte de la relación directa que tenían Los Ángeles con mi familia... y Syd Barrett es un referente musical muy grande para mí.

- Habiendo estado con cantantes bastantes sólidos... prefiere tratar mucho su propia voz, hasta hacerla irreal. ¿Por qué?

- Es la primera vez que doy el salto como cantante aunque hacía mis cosas con Los Portazos. Soy un músico más instrumental que vocal. Esta música es diferente a la que he hecho con Soleá, Lori Meyers o Antonio Arias. La producción es más atmosférica y etérea, y me resulta más interesante que la voz esté integrada con los otros elementos como otro instrumento más.

- Sale con El Ejército Rojo. ¿Y eso?

- Cuando acabé de grabar el disco, Jota y Florent de Los Planetas se mostraron interesados en este proyecto, ya me habían animado para que hiciera algo propio. Este año querían reactivar el sello del "Ejército" y el disco de Unidad y Armonía encajaba en el perfil de artistas que querían publicar. En el adelanto del disco incluimos el remix que hicieron Los Pilotos de la canción 'Equilibrio'.

- Entre la psicodelia de confitería y ese tono de melancolía sintética tan otoñal sobresale 'Equilibrio' precisamente, que se "alemaniza" y cuando coge la velocidad de crucero... Dura cuatro ¡pero podría durar cuarenta minutos!

- Es una canción muy hipnótica, con un riff de bajo pegadizo y una batería machacona al más estilo kraut. Cuando empezamos a ensayarla para los directos se nos quedaba corta y decidimos hacer un desarrollo largo, ácido e improvisado.

- Y ya por último, usted ha sido un gregario de confianza de varias marcas. ¿Qué ha aprendido en cada empresa en las que ha trabajado: Lori, Arias, Tarik y Soleá?

- He tenido la suerte de trabajar con grandes músicos, estar en primera fila para observar, aprender y tomar apuntes, ahora me apetece experimentar con este proyecto y ver dónde nos lleva.