JUAN JESÚS GARCÍA  |  Granada, 07/11/2011

En una entrevista para Diario Ideal, los baezanos de SUPERSUBMARINA dijeron que estaban en la música "para quedarse". Y desde luego no tienen prisa, haciendo camino al grabar, pasito o a pasito (tres minis y un largo), pero cada uno siempre llegando más lejos que el anterior. Y salvo algún ataque de divismo (¡aquella abrupta caída de cartel del Extratonauta!) su trayectoria ha sido coherente y desde muy abajo: ellos mismos recordaron su primer concierto en el mínimo Sugarpop de Granada, "ante veinte personas que eran casi todas de nuestro pueblo". En ese suma y sigue consiguieron un lleno sin apreturas el pasado viernes en la Industrial Copera, "la sala más grande de Andalucía" como (erróneamente) precisaron, tras dejar sin entradas anteriormente también el Planta Baja. Este otoño se meten entre pecho y espalda veinte conciertos seguidos, y con semejante dedicación los resultados son obvios, suenan, resultan convincentes en directo y sin apurar los tópicos más que lo justo (solo un problema: la iluminación, que tocar en una discoteca no obliga a que se te tenga que caer la retina a fogonazos de luz). Antes apareció el trío Lemür con sus ochenteros electrobailables.

Una vez conocido su buen nivel de venta de entradas, en pareja va el grado de entrega de los que las compraron (en su mayor parte ellas), dispuesto/as a dejarse llevar por el grupo de José Chino, Jay, Pope y Juancho hasta donde hiciera falta. El "indie para todos los públicos" es ya casi un género, y suele ofrecer un segunda lectura en directo, más rugosa, crepitante y desarrollada que en disco, y ellos no dejan de ser una excepción, en ocasiones hasta contrastando con la feliz conexión instantánea de las respetables. La golosa voz de José Chino es una de las bazas de este grupo, en ocasiones perdiendo su característico timbre incluso con falsetes "disco" todo muy vintage, abriendo una paleta de colores, ya de por sí curiosa al asegurar definirse entre Foo Fighters hasta Primal Scream, y si me apuran hasta nuestros Lori Meyers, otros que tal.

Entre sus cuatro discos tienen ya para un set completo, con picos de participación en piezas como 'Niebla', 'XXI', 'Ola de Calor', 'Elástica Galáctica' y por supuesto 'LN Granada', la canción que dedicaron a la ciudad "donde aprendimos todo y donde están los grupos que más nos gustan" como piropearon, canción que fue cantada entera por el propio público en perfecta comunión con sus autores. Por aquí han tocado ya techo, ahora solo les queda romperlo, pero no tienen prisa, el año que viene se lo tomarán de vacaciones para hacer viejo a 'Electroviral'.