Texto y fotos: Juan Jesús García
Carvin Jones: "Me gusta tocar sin red"
Empieza a ser ya un músico habitual en nuestros escenarios, pero no por hacerlo frecuente es menos atractivo porque jamás defrauda. Este verano actuó dos días como regalo de cumpleaños en el club Alexis Viernes llenando el segundo más que el primero porque los suyos son de esos conciertos que se recomiendan boca a boca. La pasada semana estrenó junto con el grupo Funkdación el primero de los dos días del Cervezas Alhambra Blues Festival en la sala Tren de Granada.
Asegura que ya tiene buenos amigos en Granada tras haber actuado en cuatro ocasiones. Entre ellos su anfitriones Funkdación, "una banda que tiene un directo muy animado y quiero ser un elemento más de su espectáculo" aseguró desde Italia en una rueda de prensa telefónica. A pesar de su relativa corta edad (1966, Texas) Jones ha sido señalado por la revista 'The guitarrist' como uno de los 50 mejores guitarristas de la historia, elogio que "me enorgullece mucho porque he trabajado muy duro para llegar a donde estoy, y soy joven, con lo cual me quedan muchos años por delante para superarme. Que te elogien es un honor, y un reto llegar a más".
Suele frecuentar este tejano -que asegura haberse dedicado a la música para salir del ambiente de su barrio periférico- tanto festivales como clubes, sometiéndose a una dieta de conciertos impresionante, contando, dice, ya con más de 5000 actuaciones entre pecho y espalda, ritmo que aguanta "haciendo deporte, sin beber y sin fumar. La música es una trabajo duro y tienes que prepararte física y mentalmente" y más el blues, que parece haber nacido para la carretera, "es que el blues es una buena manera de sentirse mal porque es música triste" y según comenta "te obliga a moverte buscando algo mejor, de ciudad, en ciudad, de concierto en concierto" un frenesí que "forma parte de la mitología del blues".
Pero si hay algo que resulta especialmente llamativo de sus conciertos es su arraigado sentido del espectáculo: desde sus cegadoras camisas de lentejuelas hasta todo tipo de exhibicionismo ayudan a que sus presentaciones sean curiosas y compartidas. Lo tiene claro: "Yo creo que teatro y música van mitad por mitad en mis conciertos" porque "hay que tocar bien y pasarlo bien al mismo tiempo, así la gente se divierte también, que es lo más importante de una actuación". Y en esto, le gusta mirarse en el espejo de Jimi Hendrix: "Tocar con un trío como él me da mucha libertad, es una fórmula mínima y muy adaptable, Hendrix fue el que llegó más lejos. A mi también me gusta tocar así, con complicidad y sin red. Hay buenos músicos pero ninguno como él, era excepcional".
Funkdación ha preparado un concierto diferente para esta noche especial en la que primará el blues y el funk sobre otro ritmos bailables que frecuentan, porque como dice su guitarrista David Margam "no siempre se tiene la oportunidad de que te acompañe uno de los mejores músicos del mundo del blues. ¡tenemos que estar a su altura!".
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