NISTAL
"10 motivos para viajar de noche"

Discos Liliput
(2005)


Texto: Dani Illana

¿Quién es este Nistal, del que poco sabemos, salvo que tiene cara de buen chaval y un disco publicado? Pues al parecer es una especie de cantautor autodidacta, asturiano, encargado de cibercafé, jovencito y melancólico; que se nos presenta con “10 motivos para viajar de noche”, un disco con diez cortes acústicos e introspectivos difíciles de etiquetar.

El debut de Nistal se muestra como una reivindicación de una personalidad creadora bastante bien encauzada, según lo que vemos. La desnudez de los cortes de “10 motivos…” nos dejan sin excesivas sorpresas; pero mantienen la frescura de las composiciones en su estado primigenio. Se nos cuela algún teclado, alguna batería, contada y escogida, que viene a apoyar a la guitarra del asturiano para evitar que esta se agote en el esfuerzo en solitario.

Lo más llamativo es la voz de Ricardo Nistal, al parecer incapacitada para las florituras y las tesituras estratosféricas; pero eso sí, muy particular, simpática y capaz de comunicar muy bien, muy parecida a la de Manolo de Astrud. El papel de los textos en este tipo de trabajos siempre es fundamental; a pesar de que aquí no se ve una poética muy elaborada, ni una escritura genial, sí se refleja con franqueza el mundo interior de un Nistal que parece ha dedicado más horas de la cuenta a mirarse el ombligo.

Dentro del álbum encontramos algunos cortes, eso sí, llamativos, como esa deconstrucción acústica del “Autosuficiencia” de Parálisis Permanete, igual de fría, pero más espeluznante todavía; o ese arrebato psicodélico llamado (cómo no) “George Harrison”, en honor al beatle espiritual; curiosísima pieza que parece sacada de un concierto de after de Sidonie.

La principal baza que tiene a jugar Nistal es que su álbum puede gustar a todo el mundo y que se deja escuchar sin ningún tipo de problema. Quizá algún día tenga su golpe de suerte, quién sabe.