MERCURY REV 
"All Is Dream"

V2
(2001)


Texto: Daniel Aravena T.

Cuando una agrupación saca un álbum bueno, se genera toda una parafernalia a su alrededor. Miles de críticos les tiran flores, pero a la vez advierten de la dificultad de superar lo logrado. Sin embargo, cuando esto se repite progresivamente y se obtiene una joya como fue "Deserter's Songs" en 1998 uno recupera la fe en el rock y en las posibilidades de reinventarse.

Después de hacer directos en cuanto festival se le atravesó en el camino (entre 1998 y el 2000), los neoyorquinos Mercury Rev se encerraron presumiblemente en un estudio lleno de ogros, duendes y bosques abandonados para dar a luz su quinta pieza magistral. "All Is Dream" es el nombre de una joya que brilla tanto que sus 12 pistas se hacen una sola.

Con la característica visión cinematográfica de Dave Fridmann (todo un gurú de perillas y teclas a estas alturas), la encantadora voz en falsete de Jonathan Donahue y los delicados arreglos de Grasshopper, este álbum es más que una buena respuesta a su laureado predecesor. Es un knock out definitivo.

Las orquestaciones grandilocuentes y majestuosas muestras de pop se mantienen, pero las obsesiones oníricas de Donahue van más lejos esta vez y pasan a enredarse con seres mitológicos ("Hercules") y consigo mismo ("Nite And Fog").

Si en "Deserter's Songs" estaba la estremecedora simpleza de "Endlessly", aquí tenemos "The Dark Is Rising"; lo que fue "Holes" hoy es más evocador aún y se llama "Tides Of The Moon" (incluso se prestan la melodía) y el pop de "Opus 40" y "Tonite It Shows" es hoy superado por una excelente pieza, mezcla de canción y composición cinematográfica: "Lincoln's Eyes" (a mi juicio, la más impresionante del disco). Por si todo esto fuera poco, vuelven las baterías poderosas (con baquetas) y las controladas guitarras con distorsión, que los caracterizó especialmente en la época de "See You On The Other Side" (1995).

En suma, un verdadero golpe al estómago que deja sin respiración en incontables momentos y que seguramente hará que nos tomemos la cabeza a dos manos y nos preguntemos si es posible mantenerse así. Una vez asumido que "All Is Dream" era candidato seguro a la lista de discos del año, me permito un juicio simple: Sale Radiohead entra Mercury Rev. Si no es así... estamos en un mundo de locos.