COQUE MALLA
"Soy un Astronauta Más"

Sony Music
(1999)


Hoja Informativa Cuatro Gatos:

Un astronauta es un hombre que está más arriba que nadie, pero también más separado de todo, a esa distancia desde la que las cosas parecen tener un tamaño abarcable, se aprecian en conjunto y se comprenden mejor. Coque Malla da la impresión de haber ido así de lejos, haberse vuelto así de sabio y haber logrado una visión tan todopoderosa como la de un viajero espacial donde se reúnen estilos muy distintos, géneros variados y detalles de procedencia diversa pero con el que ocurre lo que con todas las obras de grandes de verdad: no importa cuáles son los ingredientes, sino cuál es el resultado. 

Y lo cierto, es que el resultado no podría ser mejor: Soy Un Astronatura más es un disco a la vez contudente y exquisito, lleno de placeres inmediatos y de miniaturas sofisticadas, hecho con canciones que deslumbran la primera vez por su rotundidad y se apoderan de ti para siempre a partir de la seguda, en cuanto empiezas a paladear los detalles inagotables ocultos detrás de cada estrofa, al fondo de cada ritmo, debajo de cada melodía. Pero lo que da Coque Malla en Soy un astronauta más no son flores de plástico sino tumbas abiertas, no son puñales de juguete sino pistolas cargadas: este disco respira autenticidad y emoción por los cuatro costados, no usa ningún disfraz o se refugia en tres o cuatro trucos de estudio para parecer más raro o más moderno; su rareza y su modernidad están en su intensidad perfecta, en el acabado casi cegador de temas como QUÉ SERÁ DE NOSOTROS, TU Y YO o QUIERO SER COMO TÚ, composiciones que juntan una música compleja y llena de matices con las mejores letras que jamás ha escrito Coque Malla, unas letras que tienen lo que tiene siempre la buena poesía, esa combinación de inteligencia y atrevimiento que las hace hermosas, pero sobre todo inolvidables. Soy un astronauta más respira autenticidad y emoción porque sus riesgos y sus búsquedas no contienen una sola mentira. Por eso, mientras otros discos nos hacen pensar nada más que en los trucos, este sólo nos hace creer en la magia. 

Y luego, o tal vez por encima de todo, está la forma de cantar. Para cantar así hace falta haber ganado muchas cosas y perdido muchas otras. Para cantar sobre el desconcierto con esa rabia metálica que enseña Coque Malla en DONDE ESTÁBAIS? Hace falta haber hecho un largo camino de ida y vuelta y otra vez de ida para cantar como lo hace Coque Malla en QUIERO SER COMO TU... A David Bowie le habría gustado interpretar esta canción, pero a Frank Sinatra también. 

Ya he dicho que Soy un astronauta más es un disco intenso, profundo; pero aún no he dicho que además es veloz, divertido, que Coque Malla no ha abandonado, ni mucho menos, su famosa venta stoniana, su legendaria habilidad para inventarse riffs pegajosos y latigazos de rock & roll capaces de arrancarte la ropa u quemarte los pies. Sólo se me ocurren dos razones por las que alguien pueda quedarse quieto escuchando PAULA y MENTIRAS: o no tiene más de cien años o está muerto. Saben cuál es el truco para conseguirlo? En este país, nadie puede hablar de Keith Richards con la autoridad de Coque Malla, porque los Rolling Stones están en su música de la misma manera que Muddy Waters y Chuck Berry está dentro de la de ellos. No se trata de algo que has oído, sino de algo que llevas en la sangre. Sólo hace falta oír ROSA'S MOTEL para comprobarlo. 

Lo que no hace falta es mirar hacia atrás, ni hacia los Ronaldos ni hacia ningún otro sitio, para disfrutar o entender Soy un astronauta más, porque este disco no es la segunda parte de nada ni el segundo asalto de ningún combate, sino el principio de un futuro que tiene aspecto de ir a ser largo y luminoso. Intentar saborear los mil y un placeres que ofrece este disco redondo como muy pocos ya es un placer suficiente. 

Oír "Soy un astronauta más" es como desenterrar un tesoro.