El grupo Reunión inicia la edición 'XX aniversario' de Jazz en la Costa

Anoche comenzaron en Almuñécar las diez actuaciones que componen esta edición 'veinte aniversario' del festival Jazz en la Costa. El programa se abrió con el quinteto Reunión y se despedirá el próximo sábado con la presencia del saxofonista Joshua Redman. El grupo Reunión es un encuentro de 'all stars' del jazz contemporáneo y de fusión con una larga trayectoria individual que el año pasado se 'reunieron' por primera vez por encargo de un festival de jazz europeo; tan excelente empatía interna encontraron entre ellos que han decidido seguir e incluso grabar un disco que se publica este mismo año.

A las 22,30 de la noche en punto y con el castillo de San Miguel iluminado coronando el escenario, apareció el grupo en escena, dispuesto como una plataforma colectiva alrededor del guitarrista Check Loeb y el teclista Jim Beard y que acoge a grandes profesionales que se mueven indistintamente entre la música acústica y la eléctrica pero con un sentido muy actual de la música, en general, no solamente del jazz. En los primeros temas teclista y guitarrista se sustentaron solos en la rítmica de Tim Lefebvre y Dennis Chambers, y posteriormente se fueron añadiendo el saxofonista Eric Marienthal, y el trompetista Till Bronner. Cada uno los participantes tiene una muy larga vida propia y también ajena: todos ellos acompañan al cantante Michael Franks en su último disco y en otras actuaciones de esta gira española.

El quinteto lleva montado por los escenarios estos días un concierto organizado en torno a sus componentes casi a partes iguales, ya que el programa se lo reparten entre todos como buenos amigos, utilizando estándares de jazz (Wes Mongomery) o del pop (Billy Joel) como cambios de tercio.

Loeb, casado con la cantante española Carmen Cuesta, fue el encargado de las presentaciones. La actuación comenzó con una pieza llamada 'Starting over', composición del guitarrista neoyorkino e incluida en su ultimo disco 'Presence', y fue de menos a más terminando en clave de enervante jazz rock con un largo solo de batería de Dennis Chambers, un musculoso músico que dio sus primeros pasos del funk más enérgico de los míticos Funkadelic. De propina y ya con el público más relajado y de pie se despidieron recordando el tema final de la película 'El Golpe'.