Texto: Juanma Cantos.
Foto: Juan Jesús García.


Audrey se hizo con el primer premio de la Muestra de Música Joven Disfruta, celebrada el pasado sábado 11 de noviembre y que registró una gran asistencia y un gran nivel musical de los grupos a concurso.

Yoplay fue el encargado de abrir. Problemas personales de su Dj (una mala racha de la que esperemos se recupere enseguida), que casi hicieron que el dúo no pudiera participar en el concurso, y el poco público que se daba cita a esas horas, chocaron con el potente y bien planteado hip-hop de Sebas, uno de los mc's más respetados de Jaén, que lleva muchos años rimando con solvencia, constancia y calidad. Afortunadamente, el hip-hop en Jaén está más vivo que nunca y nombres como el de Yoplay lo demuestran. Les correspondió el tercer premio.

Tras ellos, Audrey, los ganadores de la noche (1400 euros que no vendrán nada mal para la edición de su próximo cd) demostraron que se encuentran en un estado fantástico, mezclando melodías pop con guitarras hirientes, fases de calma con momentos de tormenta. Una voz arrolladora, la de Vicky, perfecta en todos sus registros, y un grupo que ha madurado y ya es, por derecho propio, de los mejores de nuestra provincia. Rotundos pese a que su estilo aún no es del gusto mayoritario (van por libre), pero brillantes y con un extraordinario futuro por delante. Repasaron sus temas más conocidos, en un set-list semejante al del pasado Lagarto.

Por último, Fear Love & Hate se mostraron como una solvente e impactante banda en directo. Pese a algunos detalles que aún han de madurar en el futuro, se ve a las claras que muy pronto serán un auténtico referente del metal jiennense, gracias a una combinación de nu-metal, toques góticos, pasajes electrónicos y acercamientos al universo Faith No More. Muy buenos en su conjunto, con algún que otro altibajo que requiere mayor tiempo de maduración, se llevaron un merecido premio. Atentos a esta banda.

Y como guinda del pastel, Los Suaves y sus 25 años sobre las tablas, con un Yosi que, a pesar de su evidente estado, poco propio de alguien que debe enfrentarse al público, pero digno de un rockero de toda la vida, no decepcionó, ni mucho menos, a un público que llenaba el Auditorio de la Alameda. Un repaso a una envidiable trayectoria en el rock patrio, con momentos sobresalientes.

Ojalá se extienda la idea de organizar iniciativas como esta y que los jiennenses podamos disfrutar de muchas más noches con el rock en el Auditorio. Falta hace.