Texto y fotos: Davide.


Hasta tierras leonesas nos fuimos a ver a los Kannon. Es curioso que no viéramos carteles referentes al concierto, ni por la ciudad ni tan siquiera en la puerta de la sala, pero no influyó mucho, ya que parece que toda la peña se había enterado y la afluencia de público fue muy notoria, unas 200 personas así a ojo, aunque sin abarrotar la sala. Por cierto, el lugar bastante bien para hacer conciertos: escenario amplio y elevado, amplia también la pista sin columnas que molestaran demasiado, buena aclimatación, buen equipo de luces (aunque quizá eso dependa más del grupo), incluso había una cámara filmando el concierto para dar salida por dos proyectores situados a ambos lados del escenario y por los televisores en las barras. El caso es que bastante buena presencia, aunque tuviera pinta de ser una discoteca "guay" el resto de días (bastaba con ver a los gorilas trajeados hasta con guantes, de su personalidad mejor no hablamos).

Antes de Kannon disfrutamos, con todo el sentido de este verbo, de grupo telonero: CODEC , un cuarteto formado por batería, bajo, una guitarra y voz. No les vendría de más otro guitarrista para lo que tocan, pero aun así la salida de sonido era bastante contundente. Estos chicos hacen una música (y su apariencia da fe de ello) muy metálica al estilo más puramente moderno (algunos lo definirían como Nü-Metal) con melodías que entran bastante bien a la primera escucha, construidas sobre tiempos lentos en su mayor parte, pero sin prescindir de cambios, en especial de su vocalista sobre bases similares en las que pasaba de registros melódicos a otros que rozaban lo desquiciado, todo ello cantado en castellano. Buena voz, aunque no salía demasiado clara como para entender muy bien las letras. A mí su tono me recordaba algo para haceros una idea a la de Estirpe o al registro suave de Molly de Hamlet, y puede que el resto de instrumentación también me recordara a lo mismo.

Decían ser la segunda vez que tocaban. Siendo así, muy bien preparados y desinhibidos, sobre todo su bajista. Se ve que tienen sus horas de local a las espaldas. Precedidos de una intro electrónica grabada tocaron 7 temas, todos propios (al menos yo no conocía ninguno) si no me equivoco: N.N.N. # AUSENCIA # SIN SUBSTANCIA # PRISMAS # TU HERIDA # ABISMOS # EQUILIBRIO.

De ellos destacaré el último, puede que por ser aún más cañero que el resto. Vinieron a demostrar la cantidad de grupos de calidad que rulan por ahí faltos de oportunidades. Ellos aprovecharon la de esta noche (aunque quizá algo corta) para hacérnoslo ver y darse a conocer al menos entre los que allí estábamos.

A la gente le gustó mucho, y lo demostraron moviéndose bastante, aunque nada comparado con lo que vendría después. Ya habiendo acabando Codec llegaron a la sala los componentes de KANNON , aunque no tardaron demasiado en saltar a escena para empezar.

El público formado por gente muy joven, línea general yo creo de los que siguen a los gallegos, y la primera fila ocupada por unas cuantas jovencitas (era el único lugar donde se podían involucrar de lleno en el asunto sin jugarse su integridad, al igual que yo para hacer las fotos y no quedarme sin cámara).

Una vez en su sitio abrían el concierto como podía ser de esperar, con La Llave , emblema gráfico de su último disco presente en amplificadores, púas, etc.

Y mientras el sonido iba siendo más adecuado continuaron con dos temazos que cualquiera hubiera esperado más al final: Imagina y Otra Vida.

Ya se empezaba a apreciar en ese momento lo que menciono antes: la entrega total del público, de una manera que no suele darse por Pucela, con pogos rozando o mejor dicho tocando la brutalidad, y que sería tónica general en las primeras filas durante todo lo que los vigueses estuvieron en el escenario. No se quejarían, no.

Fueron interpretando sin muchas pausas temas sobre todo de sus dos últimos trabajos: Intro e Imagina , hasta presentarlos en su mayoría (unos ocho/nueve temas de cada uno); y a ellos se sumaron cuatro de su primero, De Nuevo Nunca.

El sonido del grupo fue bastante bueno en líneas generales, aunque algunas canciones pierden algo de pegada en relación a lo grabado, en particular la voz de Vicente, aunque es normal y podía ser de esperar si has analizado sus discos; hay cosas que se graban en estudio y que en directo no se pueden hacer igual, en especial doblajes de voz, aunque sus compañeros, sobre todo David, le ayudaron en ello, eso sin contar a la gente que coreaba la mayor parte de la lírica que los Kannon lanzaban.

Por otra parte, ninguna de las dos bandas se libró de ciertos acoples, pero de muy poca importancia y que para nada empañaron las actuaciones.

Y también es de destacar el juego de luces bastante vistoso de los que tampoco solemos ver por las salas de aquí que nos ofreció el técnico, y la verdad yo creo que es cosa de agradecer a la hora de ver un concierto en una sala.

La puesta en escena del grupo nada mal, moviéndose bastante (Anxo el que más) aunque cada uno sin abandonar su posición. Lo mejor el verles saltando al unísono en algunos estribillos.

Pasada ya la mitad del concierto disfrutamos de su parte emotiva (a mí personalmente me llegó) temáticamente hablando, con Chaval, que relata el 11-M centrándose en la vida de uno de tantos jóvenes con toda una vida por delante que allí perdieron la vida, y Pa , tema que Vicente dedica a la pérdida de su padre cuando tenía sólo 17 años.

También tuvimos la romántica y lenta con Si no hay dios y ¿Qué es el amor? , y es que las letras que hace esta banda suelen ser bastante interioristas y metafóricas (aprovecho de paso para decir que prefiero las letras recientes de Kannon a algunas anteriores de cierto talante "rapero", aunque quizás sea concretar demasiado).

Y yo destacaría aún más el impacto de otras que no los son, auténticas odas a la caña, la música y el volumen, y en los que nadie tocaba el suelo, como fue el caso de Arde o Suena y sin duda alguna el bombazo de este grupo que cerró el concierto reventando la sala y casi a nosotros, Ruido , que les sirvió ya de paso para presentarse (la canción lo incluye): Uka al bajo, David y Anxo (variación de la formación original en aquel primer disco) a las guitarras, Ouzo a la batería y Vicente a la voz.

Estos son KANNON, una de las bandas, si no me dejáis decir mejores, sí más peculiares de la escena musical de nuestro país, que sin ser virtuosos llegan ya a gran número de gente, y seguro que les queda mucha guerra por dar. Me alegro bastante de haberles visto en directo, sin ser para nada uno de mis grupos favoritos.

Después, nada más acabar, tuvieron el detalle de salir para atender a los fans en todo lo posible, un buen gesto a su favor.